Damages

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En el vacío existencial que dejó Lost durante los últimos 6 meses, era muy difícil encontrar una serie que produciera algún tipo de asombro o que se destaque. Por suerte, se estrenó Fringe, pero también fuimos víctimas de un parón de la serie que nos dejó con miles de preguntas y sin respuestas. Y fue en ese vacío donde de golpe, llegó Damages a mi vida. Y eso no fue poca cosa.

La historia central de Damages aparenta ser la de Ellen Parsons, joven abogada que busca una firma donde trabajar, y logra un puesto junto a la conocida Patty Hewes (increíble interpretación de Glenn Close). Pero no se confundan, Damages no es una serie más de abogados, sino que es otra búsqueda (como Lost) de romper la estructura televisiva, y contar una historia donde todos los hechos que se desencadenan van encajando de a poco en la historia, y donde la imaginación, lo que creemos que sucede juega un papel fundamental; porque aquí nada es lo que parece, nunca se puede estar seguro de quién es bueno ni malo. Será porque en Damages esa división no existe, sino la pura esencia del ser humano, donde todos hacemos cosas de las cuales nos arrepentimos algunas veces y otras no.

Damages empieza 6 meses adelante a donde va a transcurrir la historia. Ellen Parsons, es acusada de matar a su prometido, ella dice ser inocente y apunta su dedo hacia Patty Hewes. Desde ese punto, Damages nos propone viajar en el tiempo constantemente, seguir el curso de los hechos desordenadamente, nada nos es dado de golpe. Y así vamos conociendo a Ellen y su prometido, conocemos a la fantástica Patty, y conocemos el caso Forbisher, que es el tema central de la temporada. Todo lo que suceda estará ligado al caso del multimillonario que dejó en la ruina a miles de empleados de su empresa al realizar un fraude; caso que tiene en su poder Ray Fiske (Zeljko Ivanek, ganador del Emmy por este papel), que tendrá del otro lado en la defensa a Patty.

Todo en Damages tiene un por qué. No hay situaciones ni diálogos que no tengan su razón de ser; lo que vemos puede ser lo que se ve o no, puede ser algo completamente diferente. Y esto que logra Damages, es lo que integra al televidente a la historia, obligandolo a reacomodar las fichas, a volver episodios atrás para revivir situaciones, lo obliga a pensar, deducir, imaginar.

¿Qué es lo que hace que Damages sea una serie de tan alta calidad y tan buena? Sin duda, la totalidad de la suma de todos los factores que la integran: su juego con las imágenes y los colores, la manera de contar su historia, los escritores que escriben guiones maravillosos, y las interpretaciones excelentes de los actores. Casi resulta imposible imaginarse a Patty Hewes encarnada por otra actriz que no sea Glenn Close, como tampoco imaginamos a otra joven encarnando a Ellen. Pero lo que dignifica a sus personajes, a la interpretación, es que deben cambiar constantemente. Todos sus personajes pasan por diferentes estados emocionales a lo largo de la serie, muestran cara de cordero tanto como de lobo. Se transforman y sorprenden continuamente.

Quizá ( y espero que así sea) en unos años, esta serie se convierta en un clásico de la televisión, de esas series que uno debe ver porque marcaron un antes y un después. Y creo que eso es lo que ha hecho Damages: ha logrado dar una historia sin fallas, con misterio, con realismo, con pasión en sus personajes. Pero principalmente creo que dignifica a una televisión llena de programas que a la vez parecen copias de otros programas, creo que demuestra que hay mentes en algún lugar dispuestas a proponernos una nueva manera de mirar televisión.

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