Agua de Annique

Hace muchos años, llegó a mis manos un disco de una banda llamada de The Gathering, que tenía como vocalista a una señorita llamada Anneke Van Giersbergen. Desde ese momento, me enamoré de la banda, y me fasciné con la voz de esta mujer maravillosa. El tiempo pasó, vinieron discos hermosos, pero un día ella decidió alejarse de la banda para formar su propio proyecto. Y quien les escribe sintió un pequeño vacío musical; es que aquella banda me había acompañado durante mucho tiempo con su música, y aquello que tanto me gustaba ya no estaba allí.

Anneke formó Agua de Annique, banda a la cuál aprendí a querer con el tiempo y a la cual más adelanté amé tanto como amaba a The Gathering. Pero parecía muy lejana la idea de poder verlos en vivo, o sea, volver a escuchar una vez más la voz angelical de Anneke.

Sorpresa la mía cuando me entero que iban a tocar en Buenos Aires, y así fue. El Miércoles 11 de Marzo, Agua de Annique se presentó a sala llena en el ND Ateneo y el sueño se hizo realidad.

Anneke y sus muchachos dieron un recital para el recuerdo, con casi todos los temas de su disco debut "Air", algunos covers muy interesantes y dos hermosas perlitas de The Gathering. Pero, principalmente, lo que hizo que todo sea maravilloso es ella, es esta mujer fascinante, que se mueve como ninguna otra en el escenario, que tiene una voz que parece irreal por su perfección, y que emana una dulzura que en mi provoca una ternura ilimitada hacia ella. Es que Anneke canta, y canta con el corazón, con la misma emoción, las mismas lágrimas de aquel que está frente a ella escuchando. Como yo, que en más de una canción, no pude evitar emocionarme, no pude evitar transportarme al mundo donde la música y los sentimientos se entrelazan en una sola cosa. Eso es lo que puede llegar a producir una voz como la de Anneke, y no me parece poca cosa.

Este fue un momento mágico, de esos imposibles de borrar. Por eso, quiero agradecerle a L. por haber hecho esto posible y por tan maravilloso regalo. Te aseguro que estabas allí, presente conmigo, viviendo este momento tan especial para mi. Gracias a vos, guardo en mi una noche única llena de felicidad, ¡gracias!

También, y no por último menos importante, quiero agradecerle a E. por haber estado allí conmigo, por haberme acompañado a la firma de autógrafos y al recital, por haber soportado mis lágrimas de emoción y mis nervios por el hecho de finalmente conocer a Anneke. Gracias por haber compartido esto conmigo, ¡te amo!. (Qué lindo.. tocó nuestro tema...)

Y siiiiiiiiiiiiiii, finalmente conocí a Anneke en la firma! Y le hablé, y me firmó mi entrada y fui feliz!!!